lunes, 14 de noviembre de 2011

instalaciones anti-incendios recomendaciones.

¿Cómo elegirlos?
El entrenamiento de personas en el manejo de equipos extintores: matafuegos, carros, etc., está orientados fundamentalmente a facilitar la tarea de elegir el equipo más adecuado para cada tipo de fuego.

Primero, se deberá identificar la clase de fuego que se desea extinguir y luego, se procederá a elegir el equipo extintor adecuado para esa clase de fuego.

Estos programas van dirigidos a industrias, comercios, oficinas, sanatorios, etc. La capacitación consiste en una explicación previa de los tipos de fuegos, los tipos de extintores, las partes de un extintor y el uso correcto del mismo.

Además realizamos una demostración en vivo, en donde cada una de las personas que forman parte podrán utilizar el extintor para apagar un fuego, de esta manera nos aseguraremos que el uso del extintor será el correcto.
Antes de decidir la ubicación de un matafuego o extintor conviene reflexionar imaginando todas las eventualidades factibles. Los extintores ubicados sobre el probable riesgo pueden quedar anulados, si las llamas no permiten el acceso al mismo. En ciertos riesgos que presumiblemente originarán gran cantidad de humo o vapores peligrosos o venenosos, habrá que tomar en cuenta la ventilación normal del local para situar los matafuegos en los lugares de menor densidad de los mismos o libres de ellos. La inaccesibilidad de ciertos riesgos tales como motores de caja de ascensores o calderas de calefacción, obligará a una cuidadosa reflexión para encontrar ubicaciones apropiadas. La identificación visual de los matafuegos debe ser facilitada mediante la acertada elección de los colores de fondo sobre los cuales se disponen aquellos y la colocación de carteles, así como también las señales luminosas o fosforescentes, acerca de su ubicación, son convenientes.
Las normas IRAM establecen el color rojo para todos los elementos contra incendio y consideran una altura de colocación de 1.70 metros para la manija superior del extintor con los detalles que se dan a continuación:
CÓDIGO DE COLORES

CUADRADO sobre la pared, arriba del equipo lo suficientemente alto como para ser visto por sobre los obstáculos circundantes y desde cierta distancia.
FRANJA de 0,05 m de ancho sobre el piso, alrededor del equipo, dejando 0,20 m libres a cada costado y 0.50 m libres al frente.
RECTÁNGULO sobre la pared, abarcando 0,20 m alrededor, en todo sentido.
Nota: La manija superior del extintor debe estar a 1,70 m del piso.
Ref.: NORMA IRAM 10005 "CODIGO DE COLORES"
PROTECCIÓN ESTRUCTURAL. INSTALACIONES. BARRERAS PARA EVITAR LA
PROPAGACIÓN DEL FUEGO. IDENTIFICACIÓN DE ÁREAS DE ALTO RIESGO
La Protección Pasiva ó Estructural consiste en adoptar todas las medidas posibles para evitar la propagación de los incendios, cuando las medidas preventivas han fallado y se ha declarado el Incendio. Entre otras podemos considerar:
a) SEGREGACIÓN DE ÁREAS DE ALTO RIESGO
El propósito es separar sectores de gran peligrosidad de otros que ofrecen riesgos menores.
b) SUBDIVISIÓN INTERIOR
La subdivisión Interior tiene por objeto evitar la propagación del fuego. Esto resulta en una reducción de la capacidad ambiental de los locales. Por tal motivo no se dan medidas para edificios ya construidos; en cuanto a los nuevos, deben aplicarse las disposiciones contenidas en el Código de la edificación de la Ciudad de Buenos Aires.
c) FALSOS TECHOS Y TABIQUES PROVISORIOS
Se recomienda muy especialmente:
-  Eliminar cualquier subdivisión o decoración de naturaleza combustible que no sea imprescindible.
- Sustituir esas divisiones por otros materiales más convenientes, en aquellos casos en que no puedan ser eliminados definitivamente.
SI resulta Imprescindible emplear elementos combustibles para éstos propósitos, se los debe someter a tratamientos Ignífugos, que si bien no constituyen una solución ideal, por lo menos disminuye la combustibilidad a limites aceptables.
d) SÓTANOS Y SUBSUELOS
La mayoría de los comercios e industrias poseen grandes sótanos o subsuelos; ambos presentan serios problemas en la extinción del fuego que se desarrolla en su interior. La falta de accesibilidad dificulta poder llegar con elementos para la extinción, ya que el medio de acceso es generalmente el único lugar por donde puede evacuarse el humo, el aire caliente y los demás productos de la combustión. Estos riesgos comprometen seriamente la eficiencia de las salidas establecidas para emergencias.
e) MEDIOS DE ESCAPE
El principio más Importante que debe observarse en la provisión de medios de escape es el de asegurar que, al producirse un incendio en cualquier piso ya sea por debajo o encima de la planta baja, los personas puedan dar espaldas al fuego o al humo y desplazarse hacia un lugar seguro. Para lograr ese resultado todos los edificios que poseen más de una planta deben contar con un mínimo de escaleras suficiente; si es posible separadas del resto del Inmueble por paredes y puertas -de cierre automático- resistentes al fuego. Antes de encarar cualquier modificación, deben considerarse detenidamente los puntos siguientes:
1- Tipo de construcción.
2-  Distancia a recorrer.
3-  Protección de escaleras.
4-  Escaleras abiertas y escaleras mecánicas.
5-  Rutas de escape.
6-  Salidas por techos.
7 - Indicación de salidas.
8 - Iluminación de emergencia.
9-  Puertas especiales para incendio.
Debe solicitarse siempre el asesoramiento del Cuerpo de Bomberos que corresponda.
SISTEMAS DE ALARMA Y EVACUACIÓN. ORGANIZACIÓN Y DISTRIBUCIÓN DE ROLES EN CASO DE SINIESTROS. EL PÁNICO. DESENCADENANTES Y CONSECUENCIAS.
Sistemas de Alarma y Evacuación
La función primordial de un sistema de alarma de incendio es salvar Vidas. Su fin secundario es el de disminuir las pérdidas materiales. Estos sistemas tienen una hoja de servicio excelente en lo que respeta a salvar vidas y reducir las pérdidas materiales, comparando la situación con los edificios que no cuentan con protección. Cuando el Incendio es descubierto en sus etapas iniciales y es informado rápida y exactamente, se asegura la evacuación inmediata del personal y la llegada con prontitud del cuerpo de bomberos al lugar del incendio. Esta acción puede significar en algunos casos la diferencia entre la vida y la muerte o entre un amago de incendio y una catástrofe de proporciones mayores.
Existen diversas formas de lograr la comunicación ante emergencias, de entre ellas destacamos:
- TELÉFONO: permite informar al Cuartel de Bomberos y a las personas responsables del establecimiento, sobre un siniestro, el lugar donde ocurre y las características del mismo. Para evitar pérdidas de tiempo, los números necesarios deben encontrarse bien visibles y cerca del aparato telefónico.
- ALARMA. la existencia de sistemas de alarma hace más fácil comunicar una emergencia. El personal debe conocer la ubicación de las estaciones de aviso de incendio y cómo accionarias en caso necesario.
- SEÑALES: los sistemas de alarma cuentan con tableros indicadores colocados en lugares estratégicos que avisan en forma acústica y visual, sobre una emergencia y el sitio donde ésta ocurre.
- VOCES: la voz humana convenientemente amplificada por diversas formas, es también un medio habitualmente utilizado para lograr la comunicación entre personas.
Las escaleras son un medio de escape utilizable ante un siniestro, NO así los ascensores. Se aconseja no usar los ascensores en caso de incendio, debido a que el calor puede accionar los mecanismos de llamada, trasladándolos al lugar del fuego. En caso de incendio se debe preferentemente BAJAR las escaleras, no SUBIRLAS. Recuerde que el fuego y el humo suben. En cada caso, además de las salidas de emergencia habituales, deben preverse salidas de emergencia alternativas.
Las rutas y medios de escape, deben estar convenientemente señalizados mediante carteles con flechas indicadoras, fácilmente visibles, que orienten la evacuación de todas las personas, ante una emergencia. Además, previendo que se produzca corte de la energía eléctrica que anule el funcionamiento de la iluminación normal, debe disponerse de un sistema de iluminación de emergencia, que permita visualizar las salidas sin inconvenientes.
La capacitación y el entrenamiento para que las personas sepan cómo actuar en situaciones de emergencia, deberá Intensificar el mayor conocimiento sobre:
SISTEMAS DE ALARMA Y PLAN DE EVACUACIÓN, cuyas características responderán a cada caso en particular.
ASIGNACIÓN DE LOS ROLES, para que cada persona conozca de antemano qué es lo que debe hacer y cómo debe hacerlo.

SIMULACROS DE EVACUACIÓN Y EXTINCIÓN: imprescindibles para fijar los conocimientos adquiridos, corregir los errores de procedimiento y lograr una mayor eficacia, cuando la situación de emergencia real así lo requiera.
Para la protección de bienes es aconsejable adoptar las siguientes medidas principales:
- Cumplir con las reglamentaciones vigentes.
- Sectorizar las áreas.
- Instalar muros cortafuegos y puertas contra incendios.
- Eliminar o separar las áreas muy peligrosas.
- Alternar zonas muy combustibles con otras menos combustibles.
- Utilizar materiales que ofrezcan el menor riesgo posible de incendio.
- Utilizar materiales tratados con procesos retardantes a la acción del fuego.
DISTRIBUCIÓN DE TAREAS EN CASO DE INCENDIOS (Brigadas)
El tamaño y la organización de la brigada contra incendios dependen del tamaño y distribución de las instalaciones que debe proteger, la naturaleza de los riesgos de incendio, la protección para el fuego que se tenga disponible, la ayuda del cuerpo de bomberos con que se puede contar y el tiempo que se considere demore en llegar la ayuda del cuerpo de bomberos. La brigada debe ajustarse a las modalidades de la empresa. Los detalles deben ser discutidos con los expertos y con el personal de protección contra incendios de la empresa.
PÁNICO
El concepto psicológico social de "pánico" se emplea en dos sentidos diferentes: 1) reacciones individuales de temor. 2) Explosiones colectivas de miedo y huida (como furia, tumulto o agresión).
"Pánico" puede llegar a ser un acontecimiento peligroso y causar reacciones espontáneas como desorganizadas en el individuo o en la comunidad. En términos corrientes, no está claro el concepto entre estado mental del individuo y de la comunidad, entre pánico individual y colapso colectivo, y en la descripción moderna del pánico hay que considerar el rápido estallido de los temores e impulsos propios del hombre y su grupo. El hombre es muy sensible al "pánico", porque carece de los medios naturales de defensa que tienen otros animales y es por ello que el hombre primitivo vivía en un estado de pánico o crónica vigilancia y alerta movilización para la huida. Cuando el hombre civilizado forma parte de una masa, se contagia fácilmente con sentimientos de pánico, aunque también el individuo aislado puede ser llevado a acciones insensatas por la influencia del temor. Pero la masa. que reacciona mucho más emotivamente, se entrega al pánico con mayor facilidad.
Para poder controlar estos accesos es necesario estar muy bien preparados y conservar la calma en todo momento, aunque deba actuarse en, el preciso instante en que el pánico se avecina, evitando que los afectos físicos del pánico y el miedo se apoderen de las personas. Por lo que debemos tomar conciencia de esta necesidad y hacer nuestras las tres condiciones más importantes de prevención del pánico:
Información; Preparación; Acción.
Cuando la gente está bien informada, no existe lo desconocido. Porque cuando la gente está bien preparada, el temor pierde su penetración mística. Cuando la gente tiene que trabajar y actuar, no hay tiempo para promover acciones de temor. La forma práctica de evitar el pánico es por medio de ejercicios de adiestramiento. Las personas que han recibido instrucción y saben exactamente lo que deben hacer cuando suene la señal de alarma, no se dejan invadir por el pánico, Además, el sistema de prácticas sirve para reducir mucho el tiempo indispensable para desalojar un edificio. Esos ejercicios deben ser frecuentes y variados, con el objeto de que todos los ocupantes del edificio conozcan bien todas las salidas y sepan cuál es la conducta apropiada en cualquier circunstancia previsible.


lunes, 7 de noviembre de 2011

hergonomia

Hergonomía

Cada día las máquinas efectúan más trabajos. Esta difusión de la mecanización y de la automatización acelera a menudo el ritmo de trabajo y puede hacer en ocasiones que sea menos interesante. Por otra parte, todavía hay muchas tareas que se deben hacer manualmente y que entrañan un gran esfuerzo físico. Una de las consecuencias del trabajo manual, además del aumento de la mecanización, es que cada vez hay más trabajadores que padecen dolores de la espalda, dolores de cuello, inflamación de muñecas, brazos y piernas y tensión ocular.
La ergonomía es el estudio del trabajo en relación con el entorno en que se lleva a cabo (el lugar de trabajo) y con quienes lo realizan (los trabajadores). Se utiliza para determinar cómo diseñar o adaptar el lugar de trabajo al trabajador a fin de evitar distintos problemas de salud y de aumentar la eficiencia. En otras palabras, para hacer que el trabajo se adapte al trabajador en lugar de obligar al trabajador a adaptarse a él. Un ejemplo sencillo es alzar la altura de una mesa de trabajo para que el operario no tenga que inclinarse innecesariamente para trabajar. El especialista en ergonomía, denominado ergonomista, estudia la relación entre el trabajador, el lugar de trabajo y el diseño del puesto de trabajo.



La aplicación de la ergonomía al lugar de trabajo reporta muchos beneficios evidentes. Para el trabajador, unas condiciones laborales más sanas y seguras; para el empleador, el beneficio más patente es el aumento de la productividad.




Objetivos de la ergonomía:




Sistemas hombre-máquina
La figura 10-1 esquematiza un sistema hombre-máquina, acerca del cual debemos subrayar algunos aspectos.
El «input» puede entrar en el sistema en cualquier punto (lo que se representa por la flecha que penetra en el círculo por el punto «operación de máquina»).
El subsistema «máquina» posee indicadores y controles. Al interpretar los indicadores (que pueden ser de cualquier tipo: visual, auditivo o táctil), el componente «hombre» decide cómo debe usar los controles. Cuando se necesita algún tipo de ajuste, lo lleva a cabo el sistema muscular humano (causante), actuando entonces tales ajustes como nuevo «input>i
El sistema completo hombre-máquina opera en un medio de calor, tensión, humedad, ruido, etc. Este ambiente afecta, en mayor o menor grado, al rendimiento de los componentes del sistema.
Digamos ahora, a modo de digresión, que el sistema que se ilustra es del tipo denominado de «circuito cerrado», es decir, que permite al operador corregir el rendimiento del sistema. El de «circuito abierto», por el contrario, no admite la acción correctora; una vez activado ya no es posible ejercer control alguno. Un ejemplo del sistema de «circuito abierto» es el de un disparo de arma de fuego.
La figura 10-1 muestra asimismo que en un sistema hombre-máquina, el hombre desempeña tres funciones: la de percibir sensaciones, la de procesador de información y la de controlador, y, además, efectúa una interacción con la máquina en dos puntos distintos: los indicadores y los controles. Cada una de estas tres funciones será objeto de un estudio por separado. En la figura 10-2 se comparan las aptitudes respectivas del hombre y la máquina.
Este es el núcleo de la cuestión: el fin de la ergonomía es el de reducir al mínimo los errores en el empleo de indicadores y controles mediante el diseño de sistemas que resulten compatibles con ambos componentes: el «hombre» y la «máquina», tomando al hombre como ejecutor de una de las tres funciones a él encomendadas: percepción de sensaciones, procesamiento de la información y control. La ergonomía se ocupa, pues, de la interacción del hombre con la máquina y de aquél con su ambiente.
Además, en buena parte tiene que ver con el medio dentro del cual el hombre trabaja. Esto quiere decir que el interés debe orientarse hacia elementos, tales como:
• El ambiente atmosférico (incluyendo el efecto de la temperatura, la altitud, la humedad y los agentes tóxicos).
• El ambiente mecánico (incluyendo el efecto de la aceleración, la vibración y el ruido).
En este manual, en los capítulos 37 al 40 se estudian en detalle una serie de condiciones ambientales comunes que afectan al rendimiento humano.






Método científico
La ergonomía no es una ciencia exacta; pero sí un método científico de enfocar los problemas que plantean el diseño y construcción de los objetos que los hombres deben usar, en orden a incrementar la eficiencia de los usuarios y reducir las posibilidades de errores que pueden resultar en accidentes.
Esta disciplina ha recibido diferentes denominaciones; así, biomecánica, biotecnología, biofísica, ingeniería humana, factores humanos, ingeniería de los factores humanos y sicología de la ingeniería. A pesar de la amplia variedad de denominaciones, en lo que todos están de acuerdo es en que la ergonomía se ocupa de la acción recíproca de varias disciplinas como la sicología, la fisiología y la antropología.
Existen diversas definiciones rigurosas de lo que es la ergonomía; no obstante, las siguientes definiciones simples son perfectamente adecuadas a nuestros fines:
1. Diseñar algo para las personas que lo han de utilizar.
2. Diseñar un sistema de modo tal que las máquinas, las tareas humanas correspondientes y el ambiente sean compatibles con las capacidades y limitaciones de los hombres en orden a evitar errores.
3. Diseñar un sistema que se conforme a las características de las personas, en vez de intentar adaptar a éstas al sistema.
En la figura 10-3 se ilustra la diferencia entre una solución de ingeniería que toma en cuenta los factores humanos y otra que los omite a la hora de enfocar un problema de diseño de equipos.

Formación y ergonomía
Una gran parte del esfuerzo realizado en el campo de la seguridad ocupacional ha estado encaminado a cambiar al hombre mediante la formación. La preocupación por la máquina se ha limitado a la protección contra los peligros más evidentes, muchos de los cuales no son otra cosa que el resultado de un diseño deficiente o de una mala solución de ingeniería.
Existen, por lo menos, tres limitaciones en cualquier intento de cambiar algo en el hombre por medio de la formación:

• El elevado costo de cualquier proceso de formación humano, en tiempo y en dinero. Es natural que prácticamente todo puesto de trabajo requiera de algún tipo de formación, pero no es menos cierto que en determinados sistemas hombre-máquina, la aplicación de los principios de la ergonomía al diseño de la maquinaria reduce sustancialmente la necesidad de la formación.

• En ocasiones, la formación no resuelve los problemas; en efecto, algunos sistemas hombre-máquina no funcionan mejor por mucho que se pretenda formar a los operadores. Así, por ejemplo, si tratamos de enseñar a operador de un equipo a interpretar correctamente un indicador defectuosamente diseñado, éste no resolverá el problema.

• Similarmente, la formación no será suficiente para superar un rendimiento mediocre o desigual por parte del trabajador, ocasionado por un exceso de tensión originada por el incorrecto diseño de la máquina, en situaciones en que los límites del operador han sido rebasados.
El problema —visto desde el ángulo de la ergonomía— reside sencillamente en que la formación, a menudo, no constituye el modo más eficaz de afrontar la relación hombre-máquina. En realidad, tanto el equipo como el ambiente industrial se pueden estructurar de modo que satisfagan las necesidades y las capacidades del hombre; es entonces cuando la formación puede intervenir con el fin de potenciar la probabilidad de reducir con éxito el índice de errores humanos, incrementando con ello la efectividad del sistema.

Aplicaciones de la ergonomía
Veamos un par de ejemplos que nos ayudarán a esclarecer las posibilidades de aplicación de la ergonomía a indicadores y controles.
La figura 10-4 muestra dos contadores eléctricos; para leer el de abajo (antiguo, pero todavía en uso), el hombre depende primordialmente del conocimiento que tiene de tales equipos; el contador de encima, sin embargo, tiene un diseño distinto que permite reflejar directamente lo que debe leerse, con lo cual consigue obviarse el aprendizaje de una técnica de lectura.
En la figura 10-5 se ilustran dos controles de regulación de calor. El diseño del control A no ha tenido en cuenta al operador humano; el B, en cambio, ha sido diseñado para eliminar errores en las funciones de tratamiento de la información y control del equipo.
Aunque estas dos ilustraciones son muy simples, bastan como ejemplo de las posibilidades de la ergonomía.



Distribución de las tareas
En todo sistema hombre-máquina existen tareas que aquél desempeña mejor que ésta como tareas que las maquinas realizan mejor que el hombre (Ver fig. 10-2).
En general máquinas realizan mejor las tareas que implican operaciones de rutina deben ser ejecutadas con rapidez y alta precisión, mientras que los hombres dan mejores resultados en las tareas que implican responsabilidad y flexibilidad (adaptabilidad), aparte de aquellas que no se pueden programar por anticipado.
Por regla general, el hombre se ve excluido las tareas sujetas a un elevado índice de probabilidad de error. Estas tareas que suponen

• Necesidades de percepción situadas en los límites extremos de la capacidad sicológica del hombre o más allá de éstos, o que chocan con esquemas perceptivos previos.

• Necesidades de comportamiento físicamente difíciles, que chocan con esquemas previos o que son de difícil comprobación o supervisión en orden a establecer su adecuación.

• La toma de decisiones excesivamente dependientes de la memoria inmediata o que deben ser adoptadas dentro de un lapso de tiempo sumamente breve en razón de la existencia de otras tareas necesarias.

• Una sobrecarga de trabajo para el ser humano como resultado de una errónea distribución entre los factores trabajo y tiempo, o que no permiten una supervisión correcta o lo suficientemente ponderada del sistema.

• Necesidades de comunicación que chocan con otras actividades.
A menudo, la contribución hombre al funcionamiento del sistema consiste en la aportación de contramedida en el caso de funcionamiento defectuoso de éste o de fallo en alguno de sus componentes. Esto implica el conocimiento por parte del hombre de que ha ocurrido un fallo y de cuál es la solución.
Por lo general, los indicadores proporcionan la información necesaria para conocer el fallo, por lo cual deben ser diseñados de modo que puedan comunicar dicha información al operador, quien debe a continuación adoptar las medidas de respuesta adecuada por medio de los controles, con un mínimo de error; sin embargo, es precisamente en este punto donde suelen ocurrir los fallos del sistema. Los indicadores se estudiarán más adelante, en la sección titulada «Función 1: el hombre como sensor».

Análisis de las tareas
Del mismo modo que el equipo se puede diseñar en función de las capacidades y limitaciones de la naturaleza humana, los trabajos (tareas) se pueden definir en función del hombre.

Figuja 10.6
La investigación en el campo de ergonomía ha demostrado que el hombre necesita un estímulo, pero que no se le puede sobrecargar. Si el trabajo resulta demasiado fácil y  rutinario, es posible que la monotonía, el aburrimiento, posiblemente, los errores (y los accidentes) sean la secuela.
Las máquinas poseen un límite máximo de tolerancia intrínsecamente superior. Si un circuito eléctrico, por ejemplo, se encuentra sobrecargado, se fundirán los fusibles, sin que de ello resulte daño alguno para el sistema.
El hombre, en cambio, carece de un «juego de fusibles de seguridad>’; puede ciertamente trabajar durante cortos lapsos en condiciones de exceso de tensión, por ejemplo, en situaciones en que las necesidades del trabajo así lo exigen; sin embargo, cuando este exceso de tensión alcanza un punto álgido —difícil de determinar— el hombre puede derrumbarse. Este exceso de tensión es lo que implica el caso del compañero que repentinamente «pierde el control»
La labor del que da forma a un nuevo puesto de trabajo es, pues, encontrar el justo medio entre lo «fácil>’ y lo «difícil’>. Si la tensión síquica implícita en una tarea es demasiado baja (trabajos aburridos), el rendimiento es también bajo; a medida que la tensión aumenta, el rendimiento se incrementa igualmente, pero sólo hasta un cierto punto.
La cuestión será, pues, crear trabajos que alcancen el nivel de rendimiento óptimo. (Ver flg. 10-6).
La investigación moderna en materia de ergonomía se orienta al estudio del problema de la planificación del trabajo en función de la duración de la jornada laboral. Por ejemplo, la cuestión de distribuir la cantidad de trabajo necesaria entre cinco días en jornada reducida o cuatro días en jornada prolongada obliga a hacer determinadas investigaciones, principalmente en relación con la clase de trabajo. (Ver a este respecto las citas que se hacen en la Bibliografía del trabajo de Yoder y Botzum).
Método de predicción de las necesidades de cada tarea. —Las tareas humanas se predeterminan en función del diseño del equipo y de la organización provisional que se les dé, así como del conjunto de procedimientos establecidos. Se puede efectuar un desglose de las necesidades de la formación profesional, las modificaciones del equipo y las estimaciones de personal, tanto en el aspecto cuantitativo como en el cualitativo.
Las fases generales del análisis de cualquier tarea Son:

• Determinación de las funciones generales que el hombre ha de desarrollar dentro del sistema (por ejemplo, detección, tratamiento automático de la información, toma de decisiones y mantenimiento).

• Selección de los tipos de información y control que necesita el ser humano en orden a desarrollar su función (ej.: la información necesaria para la toma de decisiones y los fundamentos de la respuesta).

 •Descripción detallada de los controles, indicadores y equipo auxiliar (ej.: plano, dimensiones, iluminación, grado de luminosidad del indicador y movimientos de control).
Parte de este trabajo, sin embargo, no puede efectuarse todavía en la fase de diseño, sino que ha de esperar hasta el momento del desarrollo del sistema.
No obstante, en el desarrollo de cualquier sistema o producto actúan como restricciones impuestas a la dirección las siguientes: el costo, el programa y el rendimiento del sistema. Los ingenieros de diseño deberán interesarse por factores tales como la calidad, el grado de confianza, las posibilidades de mantenimiento, etc. Es preciso reconocer que, desgraciadamente, las restricciones impuestas sobre la dirección y otras necesidades de diseño pueden tener prioridad sobre las consideraciones relativas a la ergonomía.

Consideraciones antropométricas
Otro de los enfoques de la seguridad laboral y del producto descansa sobre el concepto de medición antropométrica.
Lo anterior implica la determinación y aplicación de las magnitudes corporales dinámicas y estáticas a modo de criterio informador del esfuerzo en pro de la comodidad, la eficiencia y la seguridad del hombre dentro del sistema; estos datos cuentan con abundante material informativo.
Las tablas 10-A y 10-B contienen datos antropométricos representativos en cuanto al peso y estatura de la población civil masculina.
Los datos antropométricos son de gran utilidad en orden a establecer las dimensiones óptimas y extremas de una serie muy amplia de puestos de operadores. (Ver fig. 10-7).
En la figura 10-8 aparece asimismo una lista de verificación en materia de ergonomía en relación con el diseño de sistemas o productos.


Función 1: el hombre como sensor
Anteriormente habíamos señalado que una de las funciones que el hombre ejerce dentro de un sistema hombre-máquina es la de sensor o analizador de información. Contrariamente a lo que afirma el vulgo, el hombre posee unos doce o trece sentidos y no cinco. (Algunos de éstos se estudian en la figura 10-9, conjuntamente con los respectivos órganos sensoriales y con la energía física correspondiente a diversos estímulos.)
Puesto que los sentidos se emplean a modo de canales de comunicación, es factible utilizarlos como inputs» de señalización o de comunicación, aunque normalmente se suele considerar la comunicación como algo que se efectúa únicamente por medio de la vista o del oído. El especialista en seguridad debe dar la suficiente importancia a la protección de los sentidos del operador manteniendo los niveles de energía dentro de los límites de seguridad.

Indicadores informativos
Un indicador informativo es un dispositivo destinado a recoger la información necesaria y a convertirla en inputs que el cerebro humano puede percibir.
Existen dos clases de indicadores informativos: pictóricos y simbólicos.

Existen dos clases de indicadores informativos: pictóricos y simbólicos.

• EN LOS INDICADORES PICTÓRICOS, las relaciones de índole geométrica y espacial se reflejan tal y como son. Los mapas, las películas y la televisión constituyen ejemplos de este tipo de indicadores.

• LOS INDICADORES SIMBÓLICOS, por el contrario, presentan la información en una forma que no tiene relación alguna con lo que representa; ejemplos son los indicadores de velocidad, los de presión y los altímetros.
Los tipos más comunes de indicadores simbólicos son los auditivos y los visuales (ver figura
10-11). Las características de diseño de ambas clases han sido estudiadas a fondo, habiéndose enunciado algunos principios generales.


Indicadores visuales

Principios de economía. —Los indicadores visuales se emplean con uno de los tres fines que a continuación se citan:

• LECTURAS CUANTITATIVAS. —Tienen por objeto la determinación de la cantidad exacta reflejada, como es el caso de un termómetro.

• LECTURA CUALITAT1VA,—Su fin es el de detectar el estado o condición de funcionamiento del sistema o la máquina; estas condiciones suelen ser tres, como, por ejemplo, «caliente», «seguro» o «frío».

• LECTURAS DICOTÓMICAS (de comprobación).—Su fin es el de comprobar las operaciones o determinar uno o dos niveles como, por ejemplo, «desconectado» o «en marcha».
El fin que se persigue con la lectura del indicador determinará el diseño de éste; no obstante, podemos afirmar que, por lo general, el mejor diseño será el más simple.



En esta figura(10.10) se ilustran tres tipos de esferas adecuadas para los tres fines que acabamos de enumerar: la de la izquierda vale para lecturas de comprobación; la del centro, para lecturas de la clase cualitativa y la de la derecha, para las del tipo cuantitativo.

Principio de compatibilidad.-EI principio de compatibilidad enuncia que el desplazamiento del indicador debe ser compatible con (0 ir en la misma dirección que) el movimiento de la maquina y de su mecanismo de control.

Por ejemplo, un indicador cuyas magnitudes se incrementan en valor numérico debe indicar un incremento correspondiente en el mecanismo que se mide.

Más aun, una aguja que se desplaza hacia la derecha al reflejar un incremento debe corresponder a un mecanismo de control, diseñado de modo tal que un movimiento del mismo hacia la derecha determine un incremento de los valores de la maquina y un incremento correlativo en el valor de la magnitud reflejada en el indicador.

Principio de disposición:-Tan importante como el diseño del indicador es la ubicación del mismo o su disposición en relación con otros indicadores. En efecto, una colocación equivocada de los indicadores puede dar origen a errores.

En ocasiones es necesario disponer las esferas en grupos dentro de una gran pizarra de control; ahora bien. Si todas las esferas se tienen que leer de modo simultaneo, es necesario que sus indicadores se hallen  apuntando en la misma dirección cuando su ajuste sea el deseado. Si se observa esto, se disminuirá el tiempo necesario a invertir en las lecturas de comprobación, además de lograrse una exactitud mayor.

Principio de codificacion.-Todos los indicadores deben codificarse (rotularse) de modo que el operador pueda determinar en seguida a que mecanismo corresponden, que clase de unidades son objeto de medición y cuál es el límite critico.

EI rotulado reviste especial importancia cuando los operadores no se hallan familiarizados con el equipo.

La efectividad de los rótulos se ve grandemente afectada por el ambiente; en efecto, si el equipo se está utilizando en un área mal iluminada, habrá que aumentar la intensidad de luz. Asimismo. Es evidente que el deslumbramiento puede constituir un problema en un local excesivamente iluminado.

Otras posibles fuentes de dificultades residen en la vibración, la aceleración y -en los indicadores auditivos, que estudiaremos a continuación- en el ruido.

Indicadores auditivos

En el caso de los indicadores auditivos se deben seguir los mismos principios establecidos para los indicadores visuales.

Además de lo que acabamos de decir, los indicadores que ahora analizamos plantean algunos problemas de índole específica.

EI problema más inmediato de todas los que debe afrontar el diseñador del sistema es el de decidirse entre adoptar un indicador auditivo o uno visual; en la figura 10-11 se comparan las ventajas relativas de ambos tipos.

Existen, sin embargo, otras consideraciones de análoga importancia; a estos efectos. Los principios que a continuación enunciamos pueden servirnos de guía:

• SITUACION.-EI diseño de los indicadores auditivos debe tener en cuenta otros aspectos relevantes del medio en el que ha de funcionar el sistema; por ejemplo, los niveles de ruido y las clases de fenómenos que la señal auditiva debe reflejar.

• COMPATIBILIDAD.-Siempre que sea posible, las señales deben  “explicar” y hacer uso de las asociaciones de ideas innatas o adquiridas por los usuarios, como, por ejemplo, identificar las altas frecuencias con las posiciones «altas» o «superiores» y las señales acústicas agudas con las situaciones de emergencia.

• APROXIMACION.-Se deben adoptar señales bifásicas en aquellos casos en que las mismas han de transmitir informaciones de carácter complejo y sea imposible utilizar medios de comunicación verbal. Las dos fases deben consistir en: (a) señales destinadas a atraer la atención y prevenir acerca de una determinada categoría de información, y (b) señales concretas, enviadas a continuación de las anteriores y destinadas a precisar la información concreta que se quiere transmitir dentro de la categoría general.

• DISOCIABILIDAD.-Las señales auditivas deben ser fácilmente identificables y distinguibles de otros sonidos, sean estos señales de otro tipo o simples ruidos.

•ECONOMÍA—Las señales enviadas al operador no deben proporcionar más información que la estrictamente necesaria para transmitir la respuesta adecuada.

• PERCEPCIÓN FORZOSA. —Siempre que deba transmitirse más de una clase de información mediante una misma señal, ésta debe hacer imposible que el operador perciba solamente un aspecto del mensaje global.

• INVARIABILIDAD. —Una misma señal debe transmitir siempre la misma información.

Función 2: el hombre como procesador de información

Son numerosas las investigaciones dedicadas actualmente a ampliar nuestros conocimientos del hombre como procesador de información. Ver a este respecto la cita que aparece en la Bibliografía acerca de la labor de McCormick.

Los juicios humanos se pueden clasificar en absolutos y relativos; un juicio relativo es el que se formula cuando existe la posibilidad de comparar dos o más objetos.
Un juicio absoluto, por el contrario, se establece en ausencia de toda regla o referencia comparativa. Se estima que la mayoría de las personas pueden distinguir entre 10.000 y 300.000 gamas diferentes de color en un contexto comparativo, pero sólo entre once y quince en términos no comparativos. De esto se infiere que cualquier sistema debe contener una mayor cantidad de juicios relativos que absolutos.

Función 3: el hombre como controlador
La tercera función del hombre dentro de un sistema hombre-máquina es la de controlador. Del mismo modo que existen principios que rigen el diseño de los indicadores en orden a facilitar su empleo eficiente por el hombre, los controles se pueden concebir de modo que se elimine el riesgo de error.
La función de control dentro de un sistema hombre-máquina se puede considerar como la respuesta a un estímulo determinado.
En numerosas situaciones la respuesta tiene un carácter generalizado; así, por ejemplo, muchas personas suponen que un interruptor eléctrico debe encenderse al desplazarlo hacia arriba y apagarse al desplazarlo hacia abajo; del mismo modo, cualquier movimiento en el sentido de las agujas del reloj suele reflejar un incremento.
Tales respuestas suelen denominarse estereotipos poblacionales>, ya que constituyen un comportamiento común a casi todos los individuos que componen una población. En la figura 10-12 se ilustran algunos otros ejemplos.
En materia de seguridad ocupacional, los estereotipos poblacionales son de especial importancia desde el punto de vista de la identificación de los peligros por medio de los sistemas de alarma. Lo ideal es que un sistema de alarma visual o auditivo se fundamenta en la asociación conocida entre determinados vocablos (peligro, precaución, aviso) y ciertos colores (rojo, amarillo, verde, azul) al concretar el grado de peligro que corresponde a una situación
 Industrial dada. Así, por ejemplo, la investigación realizada en el campo de las señales de prevención de accidentes, tal y como se definen en las Specficationsfor Accident Prevention Signs, Z35.1 del ANSI (ver la referencia al trabajo de Bryk y Bresnaharí en la Bibliografía), ha demostrado que los trabajadores asocian efectivamente los distintos grados de peligro con las diferentes señales visuales de alerta. Así, los signos de PELIGRO (color rojo), implican un grado más elevado de peligro que las señales de PRECAUCIÓN (en amarillo). De igual manera, las señales de ATENCIÓN (en verde) se asocian siempre a un grado de peligro superior al que conllevan las señales de ADVERTENCIA (en azul).
Cualquier indicador que transmita una respuesta determinante de un movimiento contrario al estereotipo preestablecido es probable que produzca errores. El diseñador que obligue a un operador a apartarse, en una situación determinada, de una línea de comportamiento que pueda considerarse como un hábito, está contribuyendo a provocar un error.
Si un operador interpreta mal un indicador mal diseñado y como consecuencia de ello acciona un control equivocado o el control correcto de modo equivocado, la seguridad del sistema puede verse afectada y su efectividad disminuida, si no completamente arruinada.

Aunque muchos informes de accidentes considerarían que en este caso hay una «acción insegura» o un error humano, lo que hay en el fondo es un error de diseño; aunque el operador fuese sometido a un proceso de capacitación, ello no evitaría la repetición de la secuencia de hechos que produjeron el accidente.
Se han publicado diversos esquemas orientativos para el diseño de indicadores y controles; a este respecto se pueden consultar las referencias a las obras de McCormick y Morgan contenidas en la Bibliografía.

Controles:

• Los controles que se emplean para controlar líquidos se supone que giran en el sentido de las agujas del reloj para cerrar el paso de los mismos y en sentido contrario para abrirlo.

• Los controles de los equipos eléctricos se supone que giran en el sentido de las agujas del reloj para conectarlos y para aumentar la corriente y en sentido contrario para desconectarlos o para disminuir la corriente. (Nótese que este sistema es exactamente opuesto al estereotipo predominante para los líquidos.)

• Los interruptores de palanquilla se supone que se encienden al accionarlos hacia arriba y que se apagan al accionarlos hacia abajo.

• Algunos colores se asocian con las operaciones de tráfico, con el manejo de vehículos o con aspectos de seguridad ..

• EI operador que maneja el vehículo que se halla bajo su control espera que cualquier desplazamiento de los controles hacia la derecha o en el sentido de las agujas del reloj produzca un movimiento similar en su vehículo y viceversa.

• Los contrastes cielo-tierra se manifiestan mediante colores y tonalidades; así, los tonos claros y azulados aluden al cielo o implican una dirección ascensional, mientras que las tonalidades oscuras o pardas hacen referencia a la tierra o a un movimiento de descenso.

• Los objetos situados a una distancia mayor se espera siempre que aparezcan más pequeños.

• Las temperaturas mas bajas se suelen asociar con los tonos azules o verdiazules, mientras que el calor se identifica con los tonos de rojo y amarillo.

• Los sonidos sumamente altos o que se repiten en rápida sucesión, asi como los indicadores visuales que cambian rápidamente o son sumamente brillantes, denotan urgencia y alarma.

• Los objetos de gran tamaño o de color oscuro implican un peso considerable; por el contrario, los objetos de tamaño reducido o de tonos claros denotan un peso liviano. Siempre se espera que los objetos voluminosos y pesados estén situados debajo, mientras que los mas pequeños y livianos se supone que vayan colocados arriba.

• Es normal suponer que el sonido de la voz humana provenga de algún punto situado frente al operador y a la altura de su cabeza.

• Se espera siempre que los asientos esten situados a una cierta altura cuando alguien se sienta en ellos.


Principios de diseño
Las investigaciones hechas han permitido establecer los siguientes principios para el diseño de controles:

Compatibilidad. —Al igual que en d diseño de indicadores, los movimientos de control se deben concebir de modo que sean compatibles con el movimiento del indicador y de la máquina. Así, una carretilla de carga, por ejemplo, en la que los controles que suben y bajan los brazos se mueven de derecha a izquierda es posible que dé lugar a numerosos errores del operador.

Codificación. —Siempre que sea posible, se debe adoptar alguna codificación para los controles. Un buen sistema de codificación de la forma, textura, situación, color y operación, ayudará a reducir muchos errores. En la tabla 10-C se ofrece un resumen y comparación de distintos métodos de codificación visual.

• FORMA Y TEXTURA. —Los controles se pueden codificar por su forma o su textura (ver figura 10-13). Las características que idealmente deben poseer los controles que se en razón de su textura son:

1. Utilidad en los casos en que la iluminación es insuficiente o en que el equipo únicamente puede identificarse y manipularse por medio del tacto.
2. Complemento de la identificación visual.
3. Utilidad en la normalización de controles a efectos de identificación.

Entre las características indeseables están:

1. Número limitado de controles que se pueden identificar.
2. Reducción de la sensibilidad manual por el empleo de guantes.

• SITUACIÓN. —Es posible identificar los controles en virtud de su situación; por ejemplo, todos los frenos de las carretillas de carga pueden colocarse en el lado izquierdo, independientemente del modelo. Análoga codificación se logra dejando una distancia mínima entre los distintos controles.
Las ventajas de la codificación basada en la situación son las mismas que ofrecen la codificación de la forma y la textura. Entre las desventajas podemos citar:

1. Número limitado de los controles que pueden identificarse.
2. Mayor necesidad de espacio.
3. La identificación no resulta aquí tan segura como en los otros tipos de codificación.
• COLOR. —E1 color puede constituir también un criterio de codificación para distintos controles. Los códigos basados en el color pueden ser:

1. De utilidad a efectos de identificación visual.
2. De utilidad en la normalización de los controles a efectos de identificación.
3. Portadores de una gama moderada de categorías codificables.

Por otra parte, la utilización de un código basado en el color tiene las siguientes desventajas:

1. Es necesario visualizar los controles de modo directo.
2. En este sistema, la iluminación no puede ser pobre o limitada.
3. Los operadores deben poseer una adecuada capacidad de percepción de los colores.

• OPERACIÓN. —En algunos controles se emplea un método operativo de codificación; es decir, el modo de operación será distinto para cada control; así, por ejemplo, los controles del limpiaparabrisas de un automóvil pueden accionarse en el sentido de las agujas del reloj para poner el mecanismo en funcionamiento, mientras que las luces de circulación se encenderán tirando de los controles. Los rasgos más favorables de este sistema son:

1. No es corriente que los controles puedan manipularse de modo incorrecto.
2. Los diseñadores del sistema suelen aprovecharse de las relaciones de carácter compatible.

Por el contrario, las características poco ventajosas que a continuación citarnos, suelen ir asociadas a este sistema:

1. Para que el operador pueda saber si ha seleccionado el control adecuado, es necesario haber activado éste antes.
2. Un diseño específico puede dar lugar a la necesidad de incorporar ciertas relaciones incompatibles al sistema.

Independiente del código que se emplee, es necesario rotular todos los indicadores y controles que formen parte del sistema; y de este modo se logra incidentalmente una reducción en el tiempo de formación necesario para el operador.

Disposición
Debe tenerse siempre en cuenta que todo sistema está orientado a la realización de una tarea y que sus componentes actúan tanto independientemente como entre sí con objeto de llevar a cabo la correspondiente tarea; esto quiere decir que los distintos elementos que componen el sistema deben disponerse en función de las consideraciones siguientes:

• PRINCIPIO FUNCIONAL. —Dispone que los distintos elementos o componentes del sistema se agrupen en razón de sus respectivas funciones, por lo cual los elementos que realicen funciones relacionadas entre sí deberán disponerse en el mismo grupo.

• PRINCIPIO DE IMPORTANCIA. —LOS componentes del sistema se pueden agrupar conforme a su importancia; así, los elementos de una determinada categoría (indicadores, controles, componentes) deben disponerse en función de su respectiva importancia en la ejecución de una serie de operaciones determinadas. Los controles más importantes deben situarse en los puntos más adecuados en orden a su rápida y fácil utilización.
La cuestión de la importancia relativa es, por supuesto, en gran medida una cuestión de puntos de vista, de modo que, para poder aplicar este principio es necesario procurarse el parecer de aquellas personas que conozcan bien el equipo; esto puede lograrse de dos maneras: interrogando directamente a estas personas o por medio de un cuestionario.

• PRINCIPIO DE LA LOCALIZACIÓN ÓPTIMA. —Dispone la colocación de los diversos componentes de modo tal, que todos y cada uno de ellos quede emplazado en su punto de localización «óptima» en función de un determinado criterio de utilización (conveniencia, exactitud, rapidez, fuerza aplicable, etc.).

• PRINCIPIO DEL ORDEN DE UTILIZACIÓN.—Es frecuente que el empleo de los controles se haga de conformidad con determinados esquemas o secuencias de relaciones; por ende, al aplicar este principio se pueden disponer los diversos componentes de modo tal que el operador se beneficie con las ventajas de la aplicación de tales esquemas, por lo cual lo más normal es que los elementos que se empleen con arreglo a una determinada secuencia de acciones se encuentren situados en una estrecha relación física entre sí.

• PRINCIPIO DE LA FRECUENCIA DE UTILIZACIÓN. —Para poder disponer los diferentes elementos en función de la respectiva frecuencia de utilización, es necesario determinar primeramente la frecuencia con que cada uno de aquéllos puede eventualmente ser utilizado; el paso siguiente consiste en situar los elementos de menor utilización en los puntos más distantes.
En caso de conflicto entre los distintos principios aplicables, se hace necesario llegar a un compromiso; a este respecto debe tenerse presente que, aunque no debe tratar de aplicarse nunca un solo principio de modo riguroso, los de orden y frecuencia de utilización deben ser objeto de la mayor atención.
Es necesario asimismo tratar de evitar cualquier modalidad de disposición de los ciernen— tos que haga necesario el desplazamiento frecuente del operador o de una parte de su cuerpo (vista, manos u otro miembro cualquiera) de un lugar a otro.


Conclusiones

Toda empresa tiene la obligación de mejorar el índice de seguridad de sus operaciones en la medida de lo posible. Tanto el profesional de seguridad como la dirección de la empresa no cumplen con sus obligaciones si ignoran o subestiman los aspectos más elementales de la problemática del accidente ocupacional y se obstinan en continuar insistiendo sobre la dimensión global del problema, que no puede resolverse por medio de una acción única.
La mayoría de las medidas que se adoptan en el terreno de la seguridad ocupacional están enfocadas únicamente a resolver una pequeña parte del problema; de modo lento, pero seguro, el progreso acumulado resultante de la solución de los distintos pequeños problemas llega a ser considerable; por el contrario, si se desprecian los aspectos parciales del problema general, no habrá progreso alguno.
La ergonomía ayuda efectivamente a resolver aspectos singulares del problema global. Uno de los puntos más débiles de todo el programa en pro de la seguridad ocupacional y de la seguridad del producto lo constituye precisa mente la falta de preocupación por las cuestiones de ergonomía. Los distintos aspectos de esta disciplina no han sido estudiados como merecen en calidad de respuesta parcial a los problemas de seguridad. Esta desidia se debe en parte a la falta de entendimiento respecto al papel que la ergonomía desempeña en la seguridad ocupacional y del producto.
El análisis de la ergonomía en relación con el método tradicional sirve para establecer el papel de aquélla dentro del movimiento en pro de la seguridad. Entre los beneficios que pueden esperarse de esta política podemos contar:
1. Mayor efectividad de los sistemas.
2. Menor índice de error en el trabajo.
3. Menor número de accidentes que ocasionen lesiones o daños a la propiedad.
4. Reducción de las necesidades de nuevo diseño de los sistemas una vez que éstos son ya operativos, siempre y cuando las medidas adecuadas se tomen en la fase de diseño.
5. Reducción del costo y del tiempo necesario para la formación de los operadores.
6. Mayor eficiencia en el empleo del personal y menor necesidad de efectuar una selección rigurosa.
El papel de la ergonomía no hará sino aumentar a medida que los sistemas se hagan cada vez más complejos y que el grado de automatización sea mayor. La aplicación de los principios de esta disciplina se convierte en elemento básico en el diseño de los sistemas del futuro si se quiere alcanzar el nivel óptimo de seguridad y de efectividad de éstos.

Ruidos y vibraciones


ESCUELA DE EDUCACION TECNICA Nº 461
                  GENERAL JOSÉ DE SAN MARTIN
       Pte. Roca 1250      RECONQUISTA         (Santa Fe)

Modulo: Seguridad e higiene industrial

Tema:          Ruidos y vibraciones


Profesor: Luciano Petean

Integrantes:
·        Alvarez Jorge
·        Correa Oscar
·        Lovera Gabriel
·        Moschén Matías






Índice:
1.0 introducción
1.2 el ruido y la conservación de la audición
1.3 propiedades del ruido
1.4 efectos del ruido sobre el hombre
1.5 consecuencias
1.6 evaluación de la audición
1.7 medios de evaluación audiométrica
1.8 control de ruido
1.9 protección personal contra el ruido





1.1 Introducción:
El ruido es uno de los agentes contaminantes más frecuente en los puestos de trabajo incluidos los de tipo no industrial, por ejemplo, las oficinas. Es cierto que en estos ambientes rara vez se presenta el riesgo de pérdida de capacidad auditiva, pero también es cierto que el ruido, aun a niveles alejados de los que producen daños auditivos, puede dar lugar a otros efectos como son: alteraciones fisiológicas, distracciones, interferencias en la comunicación o alteraciones psicológicas. Estos efectos son difíciles de valorar y, en la práctica, cualquier evaluación de la exposición a ruido en oficinas debería empezar por conocer el grado de molestia expresado por los trabajadores de la oficina.
El primer paso en el análisis de un problema de ruido en una oficina debería ser la identificación de la fuente de ruido crítica. Para ello, los trabajadores serán las principales fuentes de información. Es frecuente que las quejas por ruido estén relacionadas con una fuente concreta, por lo que las mediciones y las acciones correctoras se deberían centrar en esa fuente, ya que cualquier acción tomada sobre otras fuentes, probablemente, no conseguiría una mejora sustancial.
El segundo paso debería consistir en determinar qué aspectos hacen que un ruido sea considerado molesto. En algunas ocasiones, el problema se limita a la existencia de niveles de presión sonora excesivamente elevados, por lo que la medición del nivel de ruido continuo equivalente podría ser suficiente; en otras, será necesario conocer el espectro de frecuencia del ruido; pero en la mayor parte de las ocasiones, las mediciones del ruido deberán ser complementadas con el estudio de aspectos no físicos para determinar el grado de molestia que ocasiona el ruido, por ejemplo, el tipo de tarea, el grado de distracción que supone el ruido, su contenido en información o la actitud de las personas frente al ruido.





















1.2 El ruido y la conservación de la audición 
 La perdida de la audición es una de las principales enfermedades profesionales. Muchas veces es difícil convencer al trabajador del riesgo que supone la exposición al ruido. Por otro lado el ruido está asociado a muchas de nuestras actividades diarias y no pensamos en él como un riesgo. Nuestro cuerpo nos da pocas señales de que se esta produciendo algún daño. La perdida de la audición tiene lugar de manera muy lenta, generalmente durante meses o incluso años.
El creciente interés de las empresas por el fenómeno de la pérdida de la audición a causa del ruido se ha visto fomentado por:
-      La los fenómenos de pérdida parcial del oído dentro de los beneficios de la tendencia a favor de incluir indemnización por lesiones ocupacionales
-      La aprobación de reglamentaciones relativas a los ruidos.

Se sabe que los obreros que trabajan en oficios expuestos a ruidos tenderán a perder más rápido la audición.

¿Que es el ruido?
Todo ruido es todo sonido no deseado, una forma de energía en el funcionamiento de maquinas industriales se aplican fuerzas en distintas partes que producen desplazamientos o movimientos de dichas partes, tales movimientos producen vibraciones que generan ondas sonoras trasportadas por el aire, cuando este ruido llega a personas pueden producir efectos no deseados.


1.3 Propiedades del ruido.
Alguna de las características del ruido son: la intensidad (o presión), la frecuencia y la duración. Todos estos factores reciben importancia en la evaluación de los efectos del ruido en oído humano. Cuando mas elevado es el ruido, mayor es la intensidad: a si mismo, los ruidos de alta frecuencia son mas nocivos al oído que los de baja frecuencia y cuando mas prolongada es la explosión al ruido mas pronunciado será el daño, producido al aparato auditivo humano.
A medida que aumenta la distancia al foco emisor, la intensidad del sonido disminuye en razón inversa al cuadrado de la distancia.
Las ondas sonoras de alta frecuencia se absorben mejor por los materiales de consistencia fibrosa o esponjosa que se emplean en la construcción. 

Frecuencia: El oído es más sensible a las altas frecuencias que a las bajas. Como consecuencia, el ruido de alta frecuencia es más preocupante y molesto que el ruido de baja frecuencia.
Espectro: La molestia provocada por el ruido es mayor en el caso de tonos puros (o sonidos que tengan componentes tonales) que el caso del ruido de banda ancha.
Presión del sonido
(en microbases)
Nivel total de la presión del sonido (en Db)
ejemplo
0,0002
0
Umbral de la audición
0,00063
10

0,002
20
Estudio para películas sonoras
0,0063
30
Susurros en voz baja (a 1,5 mts de distancia)
0,02
40
Oficina tranquila
0,063
50
Hogares normales, oficinas grandes
0,2
60
Lenguaje ordinaria a (1 mts de distancia)
0,63
70
Tren de carga (a 30 mts)
1,0
74
Automóvil normal
2.0
80
Fabrica normal
6,3
90
metro
20
100
Telares de una planta textil
63
110
carpintería
200
120
Prensa hidráulica
2.000
140
Avión a reacción
200.000
180
Rampa de lanzamiento de un proyectil

Nótese: que si la presión del sonido se duplica, el nivel de la presión del mismo aumenta en 6 Db. si la presión del sonido se multiplica por 10 el incremento de nivel de presión de sonido será de  20 Db

1.4 Efectos del ruido sobre el hombre
La perdida de la audición no es el único efecto del ruido sobre el organismo. La exposición se asocia también con enfermedades relacionadas con el estrés, en particular, hipertensión, insomnio y fatiga nerviosa. Otras quejas frecuentes incluyen dolores de cabeza, aumento de la tensión muscular, ansiedad e irritabilidad. Todos estos efectos pueden ser causa de accidentes pues comprometen la capacidad de reacción de trabajador.   

Los efectos del ruido sobre el hombre son de tres tipos:
-efectos psicológicos: el ruido puede molestar, crear inquietud o nerviosismo o interrumpir el proceso de concentración o el sueño.
-Interferencia de la comunicación a través de la palabra: y como consecuencia, afecta al rendimiento en el trabajo y la seguridad.
-efector fisiológicos: perdida de la capacidad auditiva, dolor de oído, nauseas y disminución de la capacidad del control muscular (cuando la exposición es extensa) 



1.5 consecuencias
Perdida de la audición
Este fenómeno puede definirse como cualquier reducción de la capacidad         auditiva por comparación con la de una normal.
Tal perdida pude clasificarse en dos categorías distintas:
-perdida temporal de audición:
Como consecuencia de una exposición a ruidos altos durante algunas horas, en cuyo caso la capacidad auditiva normal se recupera después de un periodo de descanso, que puede durar minutos, horas, días o aun más, según la naturaleza del sujeto y la intensidad de la exposición al ruido.

-perdida permanente de la audición:
Que puede ser causada por procesos patológicos, lesiones o por la exposición a ruidos demasiados altos durante periodos prolongados. La perdida de audición ocasionada por la exposición a ruidos de origen industrial se suele  denominar trauma acústico.
·        la destrucción de los nervios o la células ciliadas que contribuye un proceso irreversible

·        la zona del oído interno resulta afectada, la misma depende de la frecuencia que integra el campo acústico y que están presentes en el nivel de exposición
·        la pérdida permanente de la audición ocasionada por ruidos se manifiesta ocasionalmente por la disminución de la capacidad del afectado para oír sonidos de alta frecuencia: si la exposición se mantiene, la reducción de la capacidad auditiva se manifiesta también  en los sonidos de más baja frecuencia, propios del lenguaje hablado.
·        Estos daños de lenta progresión puede venir acompañados en ocasiones de otros síntomas por ejemplo: campanilleos o tintineos en el oído cuando el sujeto se alega del campo acústico
·        Otros efectos producidos a largo plazo pueden ser la alteración del ritmo cardíaco y de la tensión arterial, y hasta trastornos de orden psíquico.
·        Otros elementos conflictivos en relación con el ruido de origen industrial, es la pérdida de la sensibilidad auditiva que afecta a las personas a medida que envejecen: este proceso se denomina técnicamente presbicusia


.
1.6 evaluación de la audición
La evaluación de la audición contribuye un aspecto primordial de cualquier programa de protección de la capacidad auditiva. Este tipo de pruebas debe realizarse en el momento en que se contrata a los nuevos trabajadores y puede repetirse a intervalos regulares, en ocasiones de cambio de puesto de trabajo o cuando los trabajadores abandonan la empresa. Si bien puede haber necesidad de efectuar este tipo de evaluación dentro del marco del programa de protección de la capacidad auditiva. La prueba mas importante es siempre la que se realiza antes de que un nuevo trabajador comience a prestar sus servicios. Para evaluar la capacidad auditiva de cualquier persona se emplea un audiómetro. Estos aparatos se calcifican, conforme al tipo de señal utilizada. En audiómetro tonales puros y audiómetros vocales. De estos instrumentos existen modelos manuales y automáticos.
Los llamados audiómetro tonales puros son instrumentos corrientes destinados a ser usados en la industria. Para las pruebas de capacidad auditivas que con mayor frecuencia se practican en la industria. Hay que emplear frecuencias de 500; 1000; 2000; 3000; 4000; y 6000 Hz

Audiómetro tonal puro:




1.7  Medios de evaluación audiométrica
Suele ocurrir en la industria se encuentra situado cerca de los talleres por lo que en tales dispensarios puede existir ruidos de intensidad apreciables. Si el ruido produce interferencia en la señal del audiómetro, es posible que al sujeto se lo clasifique como ¨ parcialmente sordo ¨. Para que los resultados de las pruebas audiométricas sean exactas es necesario lograr que el nivel de los ruidos de fondo se mantengan por debajo de determinados niveles. Este objeto puede lograrse acondicionando lo cales especialmente para este fin o adquiriendo unas cabina prefabricadas diseñadas para pruebas audiométricas.
Es preciso calibra periódicamente los audiómetros con el fin de garantizar la actitud de los resultados de las pruebas: esta operación debe hacerse extensiva tanto a los audífonos como a los circuitos electrónicos del equipo  y repetirse  todos los años como mínimo. Aunque si existen elementos de juicios para sospechar la presencia de funcionamiento y regular del equipo o de resultados erróneos de las pruebas. La frecuencia debe ser mayor, diariamente se puede comprobar a grandes rasgos la calibración del instrumento midiendo la capacidad auditiva de personas cuyos valores reales son conocidos.



1.8 control de ruido  
Todo problema de ruido puede descomponerse en tres partes:
(a) Un foco que irradia energía sonora,
(b) Una vía a través de la cual se propaga la energía sonora, y
(c) Un receptor como por ejemplo el oído humano.
·        El control de los ruidos en su fuente constituye un problema en ingeniería que supone la modificación o rediseño del foco emisor. Un ejemplo de este tipo de control lo contribuye la modificación de los chorros de aire comprimido para expulsión de piezas, con el fin de reducir la intensidad del ruido mediante la modificación del fluido del aire.
·        La reducción del nivel de ruido a lo largo de vía de propagación, se puede lograr de muchas maneras: protegiendo o cubriendo el foco emisor, aumentando la distancia entre este y el receptor o colocando algún elemento aislante que lo separe.
·        El control en el propio receptor (si este es humano) se puede logar de modo efectivo de diversas maneras. alguno de los métodos más prácticos consisten en: colocar el receptor dentro de una cámara aislante, el empleo de protectores auditivos y la limitación del tiempo de exposición.

                                                                                                                                 El método de los sistemas, aplicado al análisis y control de ruidos. Contribuirá a la mejor comprensión del problema en si como de los cambios que serán necesarios para lograr una efectiva reducción de ruido. Si colocamos cada una de las partes integrantes del sistema (vía y receptor)  dentro de su propia perspectiva, el problema global se vera muy simplificado. Expresando estos principios generales en términos concretos.

Aislamiento del trabajador:


En aquellos casos en que hay un número reducido de operadores y el proceso es de naturaleza tal que resulta posible circunscribir las operaciones a un área limitada. El aislamiento de los trabajadores en un recinto con tratamiento acústico proporciona un control realmente efectivo, este método se ha puesto en práctica en plantas químicas, eléctricas y metalúrgicas. Habiéndose obtenido unos resultados en términos de reducción de ruidos dentro de los recintos aislados de hasta 30 decibeles.

Aislamiento de las maquinas:
Las maquinas que descansan directamente en suelos y paredes transmiten vibraciones a estos elementos que, a su vez, provocan radiaciones sonoras. El empleo adecuado de los soporte para el montaje de maquinaria contribuye al aislamiento de estas y a la reducción de los niveles de transmisión de vibraciones.

Control de ruido por absorción:
El ruido emitido por un foco se propaga en todas direcciones: cuando la onda sonora choca contra los muros o contra otras maquinas se reflejan: por lo tanto, el valor total de la exposición al ruido dentro del local será igual a la suma del ruido directo y el reflejado. El revestimiento de los muros con materiales capaces de absorber el ruido, contribuirá a reducir el nivel de exposición dentro del local. Sin embargo, este método posee una aplicación industrial limitada, ya que el material absorbente carece de efecto alguno sobre el ruido que emana directamente del foco emisor

Sustitución de las maquinas por modelos menos ruidosos:
El campo de aplicación de este procedimiento de control de ruidos puede resultar limitado. Existen, no obstante, ciertos campos en los que la situación puede resultar factible. Entre estos podemos citar: los equipos de inserción a presión como sustitutos de los martinetes, la soldadura en lugar de los remaches y el empleo de productos químicos para el abrillantamiento de metales en lugar de los métodos mecánicos de pulido y bruñido a alta velocidad.

Reducción del tiempo de exposición:
La experiencia ha demostrado que al limitarse el tiempo de exposición disminuye la peligrosidad del ruido. Este principio queda ilustrado en el esquema de los llamados valores limites. De que hemos hablado antes.


1.9  Protección personal contra el ruido:
Existen en las industrias numerosas operaciones que no admiten reducción de ruido mediante soluciones de ingeniería. En tales casos el problema puede resolverse mediante el uso de protectores auriculares. En diversos informes científicos se ha hecho notar que estos elementos, si se los emplea adecuadamente pueden reducir la intensidad del ruido, que efectivamente llega al oído humano en 25 a 40 Db. Lo mismo que cualquier otro material de protección personal, el auricular puede producir alguna molestia al usuario;
No obstante, estos elementos se emplean con éxito en numerosas industrias, en la que se presta la debida atención al desarrollo de los programas de seguridad y a la formación del personal.
Antes de elegir el modelo de protector auricular a utilizar, es preciso informarse de las normas y reglamentos relativos a las propiedades de atenuación de sonido que deben poseer aquellos.
Los siguientes pasos son importantes para motivar a los trabajadores para que utilicen los protectores auditivos.
1.    información: sobre los efectos del ruido, los niveles de exposición, los planes de control para reducir la exposición
2.    correcta selección de protectores para que resulte adecuado al puesto, esto es, ofrezca la protección necesaria paro no resulte excesiva. Además debe resultar cómodo y compatible con otros equipos que lleve el trabajador.
3.    formación sobre el uso y el cuidado de los protectores auditivos.


Tipos de protectores auditivos.
Existen fundamentalmente dos tipos de protectores auditivos: de orejas y los tapones.


Tapones auditivos desechables                          


                                                   


Tapones auditivos reutilizables




Protectores del tipo orejas



Cuando seleccionamos un determinado es necesario tener en cuenta las siguientes consideraciones:
·        aprobaciones y certificaciones: los protectores auditivos deben estar aprobados y certificados por organismos oficiales.
·        Requisitos de atenuación del sonido: para que la protección sea efectiva, debe situar al usuario en un nivel de exposición diario equivalente a 65 y 80 Db. Por encima de 80 Db la protección se considera resulta insuficiente y por debajo de los 65 Db la atenuación resulta excesiva, puesto que pueden camuflarse sonidos importantes para la operación alarmas, maquinas. Etc.
·        Comodidad: la comodidad e también un factor importante puesto que va a tener un impacto directo en la utilización del protector durante todo el tiempo de la exposición.
·        Ambiente de trabajo: habrá que tener en cuenta aspectos como calor, humedad, higiene del medio de trabajo, ruido intermitente o continuado, etc. las orejeras son mas recomendable si la exposición es y los tapones en caso de exposición continua. En condiciones de calor y humedad los tapones son más apropiados.
·        Problemas médicos: para algunas personas que presenten infección o irritación en el canal auditivo puede resultar más aconsejable el uso de orejeras.
·        Compatibilidad con otros equipos de protección: tales como cascos y gafas de seguridad. Pantallas y respiradores.

Conclusión un programa de protección auditiva efectivo debe basarse en una correcta selección del protector y en una buena formación del trabajador sobre los efectos del ruido, y sobre el uso y cuidado del protector.








              


 


  










vibraciones

 
Índice
2.0 introducción
2.1 ¿Qué son las vibraciones?
2.2  vibraciones en el trabajo
2.3  prevención 
 
2.0 introducción
La vibración es un tema que está íntimamente asociado con el ruido, pero que con frecuencia se pasa por alto como riesgo potencial para la salud de los trabajadores. En muchas operaciones industriales, los trabajadores están en contacto corporal todos los días con vibraciones físicas intensas muy enérgicas, por ejemplo: cuando se paran en plataformas vibratorias, cuando se sientan dentro de vehículos en vibración, cuando trabajan con herramientas o maquinaria vibratorias.

2.1 ¿que son las vibraciones?

Las vibraciones son oscilaciones de un cuerpo o de partículas alrededor de una posición en reposo. En su forma más general podría definirse como un movimiento periódico de un sistema elástico alrededor de un punto de equilibrio. Los términos correctos para describir este fenómeno son la frecuencia, la amplitud y la aceleración.

El movimiento que realiza el objeto vibrante desde que sale de su punto de equilibrio hasta que llega al punto más alejado superior, luego inferior y llega al punto de equilibrio se denomina ciclo. La cantidad de ciclos por segundo es lo que se conoce como la frecuencia de vibración.

La amplitud esta representada por la distancia entre el punto de equilibrio y la máxima distancia de alejamiento. Esto también se define como la intensidad de la vibración.

Y la velocidad del objeto en movimiento pasa de un valor cero en los puntos extremos a un valor máximo cuando pasa por el punto de equilibrio. 

También las vibraciones pueden traer aparejado trastornos a nivel del aparato digestivo, como hemorroides o enfermedades gástricas; en aparato urogenital puede producir prostatitis o hematuria; a nivel ocular puede existir pérdida de agudeza visual y a nivel del comportamiento puede producir retardo en el tiempo de reacción, menor habilitad manual e irritación nerviosa.

2.2 Vibraciones en el trabajo
Cuando el hombre se encuentra en movimiento ya sea por sus propios medios o bien cuando lo hace sobre vehículos, todos sus órganos están sometidos a cierto grado de vibración. Por lo general no se genera daño, ya sea por los mecanismos de atenuación que poseemos o bien porque el nivel de las vibraciones son lo suficientemente bajos para no producirnos daños. Pero cuando las vibraciones superan ciertos límites, como muchas veces ocurre en ciertos puestos de trabajo, éstas pueden ser muy peligrosas tanto para el hombre como para las máquinas e instalaciones

La exposición a las vibraciones no es solamente algo molesto. Se sabe que esta actividad, cuando es constante, causa graves problemas médicos, tales como dolor de espalda, dolor de cabeza, mareos, síndrome del túnel carpiano, trastornos vasculares, también cervicalgias o dorsolumbalgias, por la espondiloartrosis de columna. Esta se produce por los pequeños microtraumatismos repetidos y calcificaciones de los discos intervertebrales.

Las lesiones relacionadas con las vibraciones tienen una mayor incidencia en ocupaciones como labores forestales, agrícolas, de transporte, envíos de mercancías, industria, construcción, etc. Los riesgos que producen las vibraciones dependerán del tiempo a que está sometido el cuerpo humano y la frecuencia de la vibración.

Los efectos ocupacionales de las vibraciones en la salud son resultado de los períodos prolongados de contacto entre el trabajador y la superficie que vibra.

La vibración es detectada por diversos receptores de la piel de los dedos y manos. La vibración vertical parece causar mayor malestar que la vibración en otras direcciones. Está reconocidos los efectos de las vibraciones como enfermedad profesional en muchos países, entre ellos Argentina en la LRT.

En trabajadores expuestos a vibraciones que trabajan habitualmente en ambientes fríos, los episodios repetidos pueden conducir a la pérdida de destreza manipuladora, lo que a su vez, puede interferir en la actividad laboral y elevar el riesgo de lesiones graves por accidente.



Por debajo de los 2 Hz, las vibraciones sobre el cuerpo entero desencadenan alteraciones del tipo vestibular, el mareo. Fenómeno típico en el transporte acuático.
A este mareo se lo denomina comúnmente cinetosis.
Entre las frecuencias de 2 a 30 Hz los efectos guardan relación con la resonancia de distintos órganos. 
Las vibraciones que afectan al cuerpo entero, pueden tener efectos perniciosos sobre la columna vertebral, provocando o agravando lesiones de los discos intervertebrales, lumbalgias, pinzamientos, lumbociáticas y lesiones raquídeas menores



2.3  Control
Los criterios fundamentales de prevención de los efectos causados por las vibraciones se basan fundamentalmente en la medición de las vibraciones transmitidas al cuerpo expuesto.
Para ello se utiliza un acelerómetro piezoeléctrico o vibrómetro. En la siguiente figura se muestra un esquema del mismo.
 
 
Consiste en un transductor que registra la onda vibratoria y suministra una salida eléctrica que es proporcional a la aceleración aplicada. Además puede establecer la intensidad de la vibración así como la frecuencia.
La medición de la vibración transmitida al cuerpo se lleva a cabo teniendo en cuenta el punto de contacto entre el elemento vibrante y el cuerpo (empuñadura, asiento o piso).
La normativa aplicable que establece los parámetros de comparación en nuestro país se encuentran establecidos en la Ley Nacional de Higiene y Seguridad en el Trabajo en el Capítulo 13, Ruidos y Vibraciones, Anexo V, Ítem 10- Vibraciones.

2.4         Prevención
Lógicamente que la mejor manera de prevenir los riesgos es eliminando las vibraciones en la fuente de las mismas. Como a veces eso no es posible, se debe tratar de que no lleguen al individuo que trabaja, con distintos elementos de amortiguación. En cada caso en particular es el Ingeniero o el Médico Laboral quienes deben aconsejar las medidas a tomar para mejorar las condiciones de trabajo.
Son muchas las maneras en que los empleadores y trabajadores pueden procurar reducir la exposición de estos últimos a las vibraciones, tales como:

Todos los trabajadores deberían ser informados acerca del peligro potencial de las vibraciones, ser capacitados en referencia a la necesidad del mantenimiento regular de las herramientas.
La prevención temprana a través del control de las exposiciones y la rápida notificación de los signos y síntomas iniciales de exposición a la vibración pueden reducir de modo drástico los efectos crónicos en la salud.
Los niveles de vibración en el cuerpo entero se pueden reducir frecuentemente por medio del aislamiento contra las vibraciones y de la instalación de sistemas de suspensión entre el operador y la superficie que vibra.
La vibración de brazos y manos puede resultar más difícil de controlar, pero la selección y mantenimiento apropiados de las herramientas pueden reducir drásticamente la exposición a las vibraciones.
También debería facilitarse asesoramiento adecuado a los fabricantes y usuarios de herramientas vibrantes.
En situaciones de alto riesgo, la rotación de trabajos, los períodos de descanso y la reducción de la intensidad y duración de la exposición pueden ayudar a reducir el riesgo de los efectos nocivos contra la salud.

Para prevenir los efectos de las vibraciones en el cuerpo humano se pueden adoptar medidas de tipo organizativas y de tipo técnicas.
Las acciones organizativas tienen por objeto disminuir el tiempo diario de la exposición a las radiaciones. Dentro de este grupo se incluyen:
* Organización del trabajo
* Establecimiento de pausas en el trabajo
* Rotación de puestos
* Modificación de las secuencias de montaje
Las acciones técnicas tiene por objeto disminuir la intensidad de la vibración que se trasmite al cuerpo humano a través de:
 Reducción de la vibración en la fuente: Normalmente, es el fabricante de las herramientas de un equipo el responsable de conseguir que la intensidad de la vibración sea tolerable, también es importante un diseño ergonómico de los asientos y empuñaduras. En algunas circunstancias, es posible modificar una máquina para reducir su nivel de vibración cambiando la posición de las masas móviles, modificando los puntos de anclaje o las uniones entre los elementos móviles.
 Aislamiento de vibraciones: El uso de aislantes de vibraciones, tales elementos elásticos en los apoyos de las máquinas, masas de inercia, plataformas aisladas del suelo, mangos absorbentes de vibraciones en las empuñaduras de las herramientas, asientos montados sobre soportes elásticos, etc. son acciones que, aunque no disminuyen la vibración original, impiden que pueda trasmitirse al cuerpo, con lo que se evita el riesgo de daños a la salud.
 Utilizar equipos de protección personal: Si no es posible reducir la vibración trasmitida al cuerpo, o como medida de precaución suplementaria, se debe recurrir al uso de equipos de protección personal (guantes, cinturones, botas) que aíslen la transmisión de vibraciones. Al seleccionar estos equipos, hay que tener en cuenta su eficacia frente al riesgo, capacitar a los trabajadores en el uso correcto de los mismos y mantener un programa de mantenimiento y reemplazo.
Otras medidas de prevención es la realización de un control médico anual para conocer el estado de afectación de las personas expuestas a vibraciones y así poder actuar en los casos de mayor susceptibilidad.
A sí mismo se debe informar a los trabajadores, a través de las capacitaciones, los niveles de vibraciones a que están expuestos y las medidas de protección disponibles.

En las siguientes figuras se muestran elementos usados para aislar las vibraciones

Bibliografía:

·        http://art300de1.buenosaires.edu.ar/contaminacion/ruido.htm
·        http://www.medspain.com/colaboraciones/ruidoindustrial.htm
·        http://rendiles.tripod.com/RUIDO1.html